Salmo 23
23 El Señor es mi pastor,
Nada me faltará.
2 En lugares de verdes pastos me hace descansar;
Junto a aguas de reposo me conduce.
3 El restaura mi alma;
Me guía por senderos de justicia
Por amor de Su nombre.
4 Aunque pase por el valle de sombra de muerte,
No temeré mal alguno, porque Tú estás conmigo;
Tu vara y Tu cayado me infunden aliento.
5 Tú preparas mesa delante de mí en presencia de mis enemigos;
Has ungido mi cabeza con aceite;
Mi copa está rebosando.
6 Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida,
Y en la casa del Señor moraré por largos días.
Si quieres…
“EL BUEN PASTOR DEJA A LAS 99 POR IR EN POS DE LA OVEJA PERDIDA”
(Últimos Llamados de La Misericordia de Dios, antes de que la oscuridad se cierna sobre vosotros)
(Mayo, 2015)
Y María Del Getsemaní