(Comienza Nuestro Señor y de pronto sigue un Ángel del Señor y termina nuevamente Nuestro Señor*)
¿Qué no os dais cuenta de que si no lo hacéis convencidos y por amor, que os salga de vuestro corazoncito; sois como jugadores que pagáis al mejor postor, pero no guerreros fieles y confiables del Cielo? Si vuestras renuncias no son porque el AMOR es mucho mayor que el placer que obtenéis al pecar; si sólo os abstenéis por temor y no por AUTÉNTICO AMOR NO PODRÉIS TENER CARGOS IMPORTANTES, sino sólo como soldados a las puertas que guardan una entrada por un sueldo, por un pago.
Pero si Nos Amáis y sentís que sois familia del Cielo ¿qué no haréis por vuestro Padre, por vuestra Santísima Madre, por vuestro Reino, por vuestro Hogar?
Y esto sólo lo sentiréis si avanzáis, si os adentráis en Mi Sacratísimo Corazón, ¿lo comprendéis?
El tiempo en que habéis de ganaros el puesto que tendréis DURANTE LA ETERNIDAD. ES AQUÍ, EN TIERRA, ES AHORA, y vosotros os contentáis con hacer lo mínimo, a lo sumo con no pecar GRAVEMENTE, pero ¿quiénes de entre vosotros queréis aún más que eso? ¿Quiénes de entre vosotros queréis ser perfectos, ser Santos, volveros Evangelio Vivo? Ni siquiera lo contempláis. Es más, os burláis de los que sí lo anhelan, y Soy Yo quien os insuflo ese deseo Santo y os burláis de ellos, mientras secretamente aduláis y queréis ser como los pecadores. ¿Qué os pasa, Mis Críos? (Nuestro Señor lo dice con asombro). ¡Sólo queréis ser salvos y nunca santos! ¿Dónde trazáis la línea? ¡Ser buenos, pero no demasiado porque no se vayan a burlar de vosotros u os vayáis a sentir que se aprovechan de lo vuestro…!
¿Vosotros creéis que así lograréis llegar lejos?
Si queréis lanzar una jabalina a que llegue a 100 metros debéis tirar con todas vuestras fuerzas como si intentaseis que llegara a 200 y a lo mejor llega a 100, pero si hacéis el esfuerzo de 50 y aun así esperáis… ¿cómo, Mis Niños?
Vuestros esfuerzos deben ser máximos, porque tenéis todo el mundo en contra, y no os esforzáis, sino que os contentáis con el esfuerzo mínimo, porque como veis tanto pecado a vuestro derredor y entorno, creéis que con no ser tan malos (como que os comparáis con lo peor) ya sois Santos, ¡Y NO ES ASÍ!
¿Qué he dicho Yo sobre la tibieza y la mediocridad? ¿No os He dicho que la vomitaré de Mi Boca? Pero vosotros creéis lo que queréis creer, aún en contra de Mis Leyes, de Mis decretos, de Mi Mismo Evangelio.
¿Sabéis los pocos que sois los que estáis conmigo después de dos mil años de evangelización? ¿Tenéis una idea de cuántos trabajan para Mi Reino, que es vuestro recinto final, y cuántos por acceder a los placeres de este mundo? ¿Tenéis una vaga idea…? Y aún así -siendo tan pocos-, queréis ser de los Míos y lo hacéis con una tibieza que no es digna de un siervo Mío, ¡cuánto menos de un hermano que Me dice que Me Ama!
No suméis aún más pecado al vuestro al decirMe que Me Amáis si no lo hacéis; mejor decidMe que no Me amáis, pero que anheláis hacerlo y pedidMe que os dé amor en vuestros corazones para El Cielo y para vuestros hermanos, pero ¡no prostituyáis más la palabra Amor, y cuánto menos al referiros al Cielo!
Os lo decimos, por eso os exhortamos a que preparéis vuestras almitas y que pidáis al Santo Cielo lo que necesitéis para AMAR, porque no os olvidéis que el amor es la plenitud de la ley; y si no lo tenéis, nada sois.
No Me insultéis diciendoMe que Me amáis cuando todos vuestros actos apuntan a lo contrario, más bien pedidMe amor para amar.
* Yo creo que debe haber silencio también en el Cielo desde que comienza el Getsemaní (Jueves a las 11:00 pm hasta que abre el domingo con la Resurrección, porque es entonces cuando son Los Ángeles quienes amablemente me explican …Eso creo, pero no lo sé de cierto, lo supongo).
PROTECCIONES, PRECAUCIONES Y EXHORTACIONES II
(DURANTE ESTA BATALLA FINAL QUE SE APROXIMA)
(Enero, 03)
Año del Señor 2014
Y María del Getsemaní